Talleres de lectura y escritura, meditación, ejercicios de movilidad y visitas didácticas son algunas de las actividades que llevan a cabo para fomentar el empoderamiento digital y el autocuidado en compañía. Los realizan mujeres que se conocieron en el proyecto “Cotidianas” y se reúne cada martes en el barrio de Embajadores de Madrid para practicar el autocuidado en compañía y el empoderamiento digital.

Favorecer esas relaciones sociales era el objetivo de ‘Cotidianas’, del grupo cooperativo Tangente. Se puso en marcha en 2019 varios distritos de Madrid para fomentar el encuentro de mujeres de 63 años en adelante, que ellas mismas formaran sus propias redes de amistad y apoyo. Desde que se inició el estado de alarma sustituyeron los encuentros físicos por llamadas telefónicas. Cristina Martín, una de las coordinadoras de ‘Cotidianas’ explica cómo el chat de Whatsapp que crearon y las llamadas individuales sirven ahora para informarlas de iniciativas vecinales o municipales que les pueden ayudar, o hacerles llegar información contrastada.

Una de las participantes relata que encontró una segunda familia en las 18 mujeres mayores que se reúnen en la Casa Encendida: “Me encontraba muy sola, pero ahora me siento arropada por todas mis compañeras”. El proyecto se puso en marcha para mitigar la soledad no deseada en la capital, donde hay 167.689 personas mayores de 65 años que no comparten vivienda y 129.292 de ellas son mujeres.

Durante el confinamiento, la soledad no deseada llegó casi a duplicarse, pasando de un 10% de la población a un 16,6%, según la encuesta realizada por Madrid Salud en abril del 2020.

La brecha digital, además de dificultar el acceso a los servicios bancarios, es un escollo más en la lucha contra la soledad de los mayores. “Muchas veces la tecnología supone una barrera que los posiciona en un lugar de vulnerabilidad y desapego social”, explica Violeta Buckley, coordinadora de la iniciativa que les enseñó a utilizar herramientas digitales para que pudieran seguir en contacto en los meses más duros de la pandemia.

Tras la experiencia con las vecinas de Centro y Arganzuela, surgió la iniciativa “Portales”, que se desarrolla a día de hoy, con un nuevo grupo en el distrito de Usera, donde hay 7.440 mujeres mayores de 65 años que viven solas.

Fuente: tangente.coop / elpais.com